
Clase 2: La herida no es tu culpa
Bienvenidos.
Una vez que estudies la clase pregrabada, por favor, responde las siguientes preguntas:
Este es la transcripción del video.
La Herida No Es Tu Culpa, Pero Tu Sanación Sí Es Tu Responsabilidad
Introducción
La sanación personal es un proceso profundo que implica tomar decisiones conscientes para reconectarnos con nuestra esencia. Este segundo punto se enfoca en cómo asumir la responsabilidad de nuestra recuperación puede transformarnos y llevarnos a descubrir nuevos caminos hacia el bienestar.
Reconectar con la Esencia: Un Camino Hacia la Sanación
En mi experiencia, descubrí que el primer paso hacia la sanación era reencontrarme con las actividades que me apasionaban y me llenaban de vida. Fue así como encontré apoyo en un grupo liderado por mi psicóloga Javiera Carter, donde aprendí conceptos fundamentales que explicaban lo que sentía pero no entendía.
Este proceso me llevó a conocer a profesionales y mentores que influyeron significativamente en mi recuperación. Entre ellos, el Dr. Iñaki Piñuel y Sandra, quienes aportaron herramientas valiosas que me ayudaron a redescubrir mi esencia.
El Poder de las Actividades Significativas
Volver a realizar actividades creativas, como escribir, dibujar o usar materiales que me hacían sentir viva, fue clave. Esto me permitió reconectarme con mi yo interior y comenzar a recuperar lo que creía perdido.
Una oportunidad inesperada surgió durante la pandemia: fui seleccionada para trabajar en una ONG dedicada a la prevención del VIH en mujeres latinas y otras minorías. Esta experiencia transformadora me enseñó sobre la vulnerabilidad de las mujeres en situaciones de violencia y cómo el trabajo comunitario puede ser una vía poderosa para sanar tanto a los demás como a uno mismo.
Los Retos y Decisiones en el Camino de la Recuperación
Asumir este nuevo rol no fue sencillo. Descubrí que mi memoria y capacidad de concentración estaban severamente afectadas, lo que me obligó a esforzarme mucho más de lo habitual. Sin embargo, este desafío me llevó a tomar decisiones significativas para mi bienestar.
Decidí hacer una lista de sueños y actividades que siempre había querido realizar. Uno de ellos era convertirme en coach ontológica, un sueño que materialicé al inscribirme en una formación de dos años. Este proceso no solo fue un reencuentro con mi formación educativa, sino también una forma de darme cuenta de que la responsabilidad de mi vida y mi felicidad recaía únicamente en mí.
Reflexión Final: La Responsabilidad Personal
Sanar no significa volver a ser la persona que éramos antes de vivir experiencias difíciles. Es un proceso de transformación que nos permite rescatar nuestra esencia, pero desde una versión mejorada. Hoy entiendo que asumir la responsabilidad de mi sanación fue el paso más importante para convertirme en quien siempre soñé ser.
